Fumar,
un daño no solo a la salud si no al medio ambiente
El fumar es un habito nocivo
para la salud, pero también genera un impacto negativo en el medio ambiente. El
tabaco produce contaminación atmosférica, deforestación, cambio climático,
generación de residuos e incendios forestales.
Hoy en día gran parte de las
ciudades hay restricciones para fumar en espacios cerrados como hospitales,
escuelas, etc., por lo que los fumadores tienden a la tarea de salir a fumar al
exterior y producen grades emisiones de gases y tóxicos contaminantes a la
atmosfera.
Los componentes más
importantes del cigarro son el alquitrán y la nicotina pueden contaminar hasta
50 litros de agua, además de matar peces, pájaros y animales que se pongan en
contacto con todo este residuo, se gasta además una gran cantidad de papel para
confeccionar los cigarros y los paquetes.
Los incendios pueden
producirme en el general por las colillas mal apagadas, pero también favorece
la deforestación ya que se talan bosques para cultivar tabaco debido a la gran
demanda de este producto en el mercado.
En conclusión, no solo se daña
la salud del fumador, de las personas que lo rodean sino también genera o
intensifica problemas ambientales globales. No es un inocente acto privado
fumar que solo afecta a quien lo hace, sino que sus consecuencias ecológicas se
extienden y al ser tanta la cantidad de personas que lo hacen, ya son millones
de personas que fuman cada día.
Las industrias tabacaleras son
de las más importantes en el mundo y las que más impacto hacen en diferentes
lugares para que no se restrinja el consumo de tabaco, pero ellos están
lucrando con la salud de las personas y además empeorando los problemas
ambientales, es importante que estas empresas no reduzcan sus ventas, pero si
implementen medidas para que los residuos de los cigarrillos nos generen un
gran impacto al ambiente
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